Cuando ser útil pesa más que ser feliz

Cuando ser útil pesa más que ser feliz

En psicología cognitiva, entendemos que los pensamientos que guían nuestras relaciones no siempre son conscientes ni saludables. Muchas personas desarrollan sin saberlo creencias disfuncionales como “valgo por lo que hago por los demás” o “si no soy útil, me dejarán de querer”. Estas ideas tienen raíces tempranas, frecuentemente en entornos familiares donde el afecto se condicionaba al rendimiento o la disponibilidad.

El origen de la dependencia de la utilidad en las relaciones

Durante la infancia, algunas dinámicas enseñan que el cariño se gana a través del esfuerzo constante. Con el tiempo, esta percepción se convierte en una creencia central que condiciona los vínculos adultos. La persona adopta el rol de cuidador o salvador, creyendo que solo así será aceptada y valorada.

Aunque al principio sentirse útil aporta reconocimiento, con el paso del tiempo aparecen el desgaste emocional, el resentimiento y una profunda desconexión con las propias necesidades.

El refuerzo social y la pérdida de autoestima

Desde la perspectiva cognitivo-conductual, este patrón se mantiene por los refuerzos sociales: “eres tan generoso”, “no sé qué haría sin ti”. Estos mensajes fortalecen la identidad de “persona útil”. Sin embargo, casi nunca se refuerza el derecho a poner límites, decir “no” o priorizar el propio bienestar. La autoestima acaba dependiendo más de la aprobación externa que del reconocimiento interno.

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Cómo romper el ciclo de la dependencia de la utilidad

Superar este ciclo implica varios pasos fundamentales:

  1. Identificar las creencias disfuncionales que alimentan la necesidad de ser imprescindible.

  2. Cuestionarlas y evaluar si son realmente ciertas o útiles.

  3. Sustituirlas por pensamientos más equilibrados como “tengo derecho a cuidar de mí” o “mi valor no depende solo de lo que doy a los demás”.

El proceso terapéutico ayuda a reconstruir una autoestima más autónoma, basada en el respeto mutuo y no en la entrega incondicional.

Relaciones saludables y autenticidad

Nadie debería sentirse atrapado en una relación donde el precio de ser querido es dejar de ser feliz. A largo plazo, el verdadero vínculo sano es aquel donde ser uno mismo pesa más que ser útil.

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Recuerda: establecer límites y priorizar tu bienestar no es egoísmo, sino un acto de respeto hacia ti y hacia los demás

En CIPSIApsicologos somos expertos en este ámbito y te podemos ayudar.

Escrito por Francisco Ortiz director de CIPSIApsicologos.