En pocos días serán las vacaciones de semana santa y además las restricciones por COVID-19 son cada vez más bajas. Esto nos lleva a pensar en una gran variedad de cosas que hacer y como invertir y exprimir nuestro tiempo libre. En el artículo de hoy queremos proponer otra manera de enfocar nuestro tiempo libre, disfrutando del arte de no hacer nada.
El arte de no hacer nada
Este no es un concepto nada revolucionario, aunque si cada vez menos practicado, sobre todo en la sociedad actual. Este concepto propone una idea central: la utilidad del descanso.
Nadie discute que la actividad física y mental es positiva, el problema está en que en la actualidad la tendencia está en no detenerse nuca. No tenemos marcados unos ritmos claros de nuestra vida, siempre intentamos estar al 100%, ya sea en el trabajo o estudios intentando rendir al máximo, como en nuestro tiempo de ocio intentando exprimirlo y hacer cosas todas las horas libres de las que disponemos.
Todo esto, conlleva que no podamos separar los ritmos entre los tiempos en los que tenemos obligaciones y los de ocio, manteniéndose la respuesta de estrés en el organismo.
Pero, ¿En qué consiste no hacer nada?
Obviamente, esto ha de ser relativo, no hay que tomárselo al pie de la letra. Lo mejor es aprender no hacer tanto caso a las presiones sociales y culturales que nos invitan a estar siempre activos y aprender a escuchar a nuestro cuerpo y darle lo que necesita.
Dedicar intencionadamente un rato al día a no hacer nada puede aportar muchos beneficios a tu salud mental y física: darse un baño prolongado, tumbarse en el sofá, practicar meditación…
Conoce como nos afecta nuestro estilo de vida en este artículo.
También es cierto que en el inicio de estás prácticas puede impactar el no conseguir el «silencio mental´´, y tendemos a estresarnos al no conseguirlo. Esto es algo normal cuando vivimos con tanta sobreestimulación.
Consejos para las vacaciones
- Dedica un tiempo al día a no hacer nada. Tu cuerpo y tu mente lo agradecerán.
- Reduce el uso del móvil siempre que sea posible.
- Aprovecha para visitar sitios tranquilos que te permitan centrarte en el momento presente.
Artículo escrito por: Sergio García