Cerebro izquierdo vs. cerebro derecho: ¿mito o verdad?

 

No es infrecuente encontrarnos con posts o cuestionarios online que nos informen de cuál es nuestro hemisferio dominante o de cómo hacer para fortalecer el más débil de los dos. La idea de que cada mitad del cerebro se dedica a un tipo de funciones forma ya parte del imaginario colectivo. El “cerebro derecho” es analítico, lógico y estructurado; el derecho es creativo, artístico y emocional.

 

Y sin embargo, podríamos cuestionarnos si realmente esto es verídico o por el contrario se trata de un popular mito.

 

 

La división funcional entre hemisferios

 

Aunque esta creencia de que cada función está destinada a uno u otro hemisferio no es del todo correcta, sí que tiene parte de verdad. Existe una cierta especialización de cada uno de ellos, de manera que procesan de manera preferente un tipo determinado de información.

 

El hemisferio izquierdo está especializado en el procesamiento secuencial, detallado y analítico. Participa en gran medida en tareas como la comprensión y producción del lenguaje, las operaciones visoespaciales y la construcción de representaciones complejas. Por otro lado, el hemisferio derecho se especializa en un procesamiento más holístico o global, de un estímulo en su conjunto. Está vinculado al procesamiento emocional, al desarrollo de la empatía y a la intuición.

 

 

– Si quieres saber más sobre la intuición, puedes leer nuestro artículo pinchando aquí

 

No obstante, a pesar de que sea cierto que cada parte del cerebro es más eficaz en el procesamiento de un tipo concreto de información, ello no quiere decir que no participe en las funciones destinadas a su mitad contraria. Ambos hemisferios participan conjuntamente en una misma función. Además, en muchos casos es necesario integrar la información procedente de las respectivas zonas para poder realizar de manera correcta una tarea.

 

Investigaciones acerca de la lateralización interhemisférica

 

Los estudios que intentan comprobar la diferenciación funcional de cada hemisferio se encuentran con datos diversos, que en general parecen indicar cierta especialización funcional

 

Estudios con pacientes epilépticos

 

Algunos casos de epilepsia no pueden ser tratados con fármacos. Esto hace que, en los casos más graves, sea necesaria una operación denominada comisurotomía. Esta consiste en una sección de las fibras que unen ambos hemisferios (el cuerpo calloso) para evitar que la actividad epileptógena alcance todo el cerebro.

 

 

Es por ello, que los sujetos comisurotomizados son una valiosa fuente de datos para el estudio en este campo. Investigadores como Sperry y Gazzaniga realizan estudios con personas que han pasado por esta operación, e intentan ver cómo responden en función de si la información llega a uno u otro hemisferio.

 

De manera general, queda probado que cada hemisferio es más eficiente en un tipo concreto de procesamiento. Aún así, estos pacientes con “cerebro dividido”  suelen tener dificultades a la hora de integrar distintos tipos de información. Por ejemplo, en una prueba en la que se presenta un estímulo compuesto, enviando una imagen al ojo derecho (procesada por el hemisferio izquierdo) y una palabra al ojo izquierdo (procesada por el hemisferio derecho), es posible que el participante no sea capaz de integrar el estímulo en su totalidad, pues la información en cada caso ha sido procesada por el hemisferio que no le corresponde en un principio.

 

Creatividad e integración de funciones

Qué es la creatividad

Aunque esta habilidad esté “reservada” en un principio al hemisferio derecho, también hay una participación de su contraparte, el hemisferio izquierdo. Al tratarse de una actividad compleja, compuesta a su vez por numerosos procesos, resulta necesaria, de nuevo, la participación conjunta de ambos hemisferios.

 

La intervención de cada una de las mitades cerebrales en el proceso creativo no es la que se esperaría en un principio. El hemisferio derecho se dedica tanto a tareas intuitivas como a la búsqueda de explicaciones. Esta última tarea parecería más propia del hemisferio izquierdo, analítico, pero es llevada a cabo por el derecho, que es capaz de integrar de forma global la información. Por su parte, el hemisferio izquierdo se encarga de la elaboración de relatos, un proceso que intuitivamente diríamos que se correspondería con el derecho. En realidad, esto cobra sentido cuando nos damos cuenta de que para la elaboración de relatos es necesario ordenar la información en una secuencia

 

Artículo escrito por CIPSIA Psicólogos Madrid: Irene Serrano