Los seres humanos somos seres complejos donde entran en marcha muchos procesos tanto físicos como psicológicos día a día para nuestro funcionamiento. Ambos tipos de procesos son necesarios para nuestra supervivencia y además se relacionan de manera bidireccional entre sí. Uno de los procesos orgánicos que tiene una mayor influencia en nuestro día a día son los ritmos biológicos. Dentro de estos ritmos habría distintos tipos que tendrían una influencia diferente. En el artículo de hoy hablaremos sobre los ritmos circadianos.
Ritmos circadianos
Como hemos dicho al principio de este artículo, los ritmos circadianos son unos ritmos biológicos que influyen en nuestro funcionamiento. En concreto, los ritmos circadianos hacen referencia a las oscilaciones de las variables orgánicas o biológicas en intervalos de 24 horas. Aunque estas variables son endógenas, hay determinadas variables que tienen una gran influencia como la luz o la temperatura. Estos ciclos son diferentes para cada persona y su nivel de actividad más alta se puede establecer en la mañana, la tarde o la noche.
Cuando se produce una alteración de estos ritmos, se producen alteraciones y problemas. Uno de los más habituales es el jet lag, que se produce a causa de una modificación drástica en las horas de luz tras estar en una zona horario muy diferente a la que residimos habitualmente. Además, también se ha visto que estos ritmos influyen en algunos problemas psicológicos, como el trastorno bipolar, la depresión o el insomnio. En concreto, cuando las personas sufren desórdenes en el sueño es más probable la aparición de una fase maníaca o hipomaníaca.
– Si quieres saber más sobre el trastorno bipolar, puedes leer nuestro artículo sobre este problema pinchando aquí
– Si quieres saber más sobre cómo mejorar el insomnio, puedes leer nuestro artículo pinchando aquí
Artículo escrito por CIPSIA Psicólogos: Sara Catalán