Después de despedir el año, es muy habitual que pensemos en nuevos retos y metas que realizar este próximo año en el que entramos. Sin embargo, en muchas ocasiones tendemos a elegir objetivos de año nuevo que no podemos llevar a cabo o que no sabemos cómo realizarlos. Por ello, en el artículo de hoy hablaremos de los objetivos de año nuevo y veremos algunas estrategias que no ayuden a llevarlos a cabo y a conseguirlos con mayor facilidad.
Objetivos de año nuevo
Los objetivos de año nuevo son unas metas que nos proponemos realizar en el año entrante. Generalmente responden a objetivos personales no cumplidos o a necesidades personales que en ese momento no están satisfechas. Por ejemplo, algunos de los objetivos de año nuevo más comunes suelen estar vinculados al deporte y a la vida saludable o a aspectos de nuestra personalidad o comportamiento que queremos mejorar.
Aunque en algunas ocasiones no se dé mucha importancia a los objetivos de año nuevo, ya que es habitual que nos cueste seguirlos y llegar a la meta final, éstos tienen una gran utilidad. Al fin y al cabo, los objetivos de año nuevo nos permiten poner en perspectiva aquellas cosas que nos gustaría conseguir para mejorar nuestro bienestar y nos movilizan para conseguirlo. Sin embargo, el no conseguirlos puee derivar en problemas psicológicos como frustración, estrés o ansiedad.
Respecto a los tipos de objetivos de año nuevo que existen, éstos son tan amplios como las personas que se los proponen. Sin embargo, como hemos comentado en párrafos anteriores, hay algunos objetivos que son más comunes que otros. Generalmente, estos objetivos responden a factores importantes para la vida de cualquier persona. A continuación os exponemos algunos de los objetivos que más se suelen repetir:
- Hacer deporte de forma regular
- Mejorar nuestra alimentación y hacerla más saludable
- Perder peso
- Mejorar nuestra personalidad cambiando algún aspecto que no nos gusta
- Dejar de fumar
- Reducir o dejar el consumo del alcohol
Algunas estrategias útiles para conseguir los objetivos
Ahora que ya sabemos qué son los objetivos de año nuevo y la utilidad que tienen para algunos aspectos de nuestro bienestar, vamos a ver algunas estrategias que nos van a ayudar a conseguirlos de una forma más fácil. Antes de empezar a relatar estas estrategias, es necesario tener en cuenta que como hemos visto en párrafos anteriores, en algunas ocasiones estos objetivos no nos resultan fáciles de conseguir y acabamos por abandonarlos a la mitad. Por ello, es importante que tengamos en cuenta estas estrategias para poder hacernos más fácil la consecución de estos objetivos sin abandonarlos.
Elige un objetivo personal, que te motive
La primera estrategia y una de las más importantes, es escoger un o unos objetivos de año nuevo que nos motiven, que sean personales. Si escogemos un objetivo que no nos guste y con el que no estemos contentos nos vamos a desmotivar enseguida y no vamos a conseguir más que frustrarnos. Por ello, es importante que no nos dejemos llevar por lo que creemos que deberíamos conseguir y nos centremos en aquello que nos gustaría conseguir.
– Si quieres saber más sobre cómo mantener la motivación, puedes leer nuestro artículo pinchando aquí.
Define bien lo que quieres conseguir
La segunda estrategia que nos va a ayudar a conseguir nuestros objetivos de año nuevo es la definición de éstos. ¿Esto que quiere decir? Si nos planteamos un objetivo muy amplio y sin concretar no vamos a saber cómo conseguirlo de forma específica y vamos a dar “palos de ciego” sin acercarnos realmente a ninguna meta concreta, ya que ésta no existe. Por ello, es importante que concretemos lo máximo posible qué queremos conseguir. Por ejemplo, en vez de quiero ser mejor persona que es un objetivo poco concreto, sería
mejor quiero ser una persona más organizada.
Reflexiona cómo puedes incorporarlo a tu vida según tus posibilidades
Una vez que tenemos clara nuestra meta de año nuevo, es importante que la incorporemos a nuestro horario según nuestras posibilidades. Si intentamos realizar este objetivo pensando en dedicarle un tiempo del que realmente no disponemos, es fácil que acabemos desmotivándonos y abandonando este objetivo. Por ello, lo mejor que podemos hacer es adaptar nuestro objetivo al tiempo del que disponemos para dedicarle.
Divide tu meta en distintas fases
Una vez que tenemos claro qué objetivo nos vamos a proponer y cuánto tiempo diario o se
manal vamos a dedicarle, es necesario que establezcamos distintas fases o metas intermedias. Esto nos va a ayudar a ver una progresión y un avance en el objetivo, y por otro lado nos va a motivar ir alcanzando estos pequeños objetivos evitando que abandonemos nuestro objetivo.
Reconócete los méritos que vayas consiguiendo
Por último, cuando nos proponemos un objetivo personal ya sea en la época de año nuevo o en cualquier otro momento, es muy importante que vayamos reconociendo y premiando nuestros avances. De esta forma podremos ser conscientes de las cosas que hemos conseguido y estar más motivados por el proceso.
Artículo escrito por CIPSIA Psicólogos Madrid: Sara Catalán
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