El año nuevo es una fecha en la que para muchos no sólo comienza un nuevo año, sino que también marca el inicio de una nueva etapa vital. Suele ser habitual que se aproveche el final e inicio de año para reflexionar sobre los aspectos de nuestra vida que se pueden mejorar. De hecho, es uno de los momentos del año dónde se empiezan más hábitos y rutinas nuevas de ahí nace el refrán año nuevo, vida nueva. Por ello en el artículo de hoy hablamos sobre los propósitos de año nuevo y cómo conseguir que esta época suponga un cambio real en nuestra vida.
Año nuevo, vida nueva
Cómo decíamos al comienzo de este artículo, el inicio de un nuevo año para muchos supone una época de cambio y una oportunidad para analizar los aspectos de su vida que no van cómo desearía. El refrán año nueva, vida nueva hace referencia a este hecho. ¿Por qué el año nuevo supone este momento de reflexión personal? Generalmente durante nuestra rutina habitual llevamos un ritmo de vida muy ajetreado que apenas nos permite dedicarnos tiempo a nosotros mismos y a nuestro crecimiento personal. Sin embargo en navidades y en año nuevo contamos con el tiempo suficiente para reflexionar sobre estos aspectos.
Además, otro factor importante por el que se hace esta reflexión en estas fechas es el hito que marca un comienzo de año. Cuando sentimos que algo se termina solemos echar la vista atrás y evaluar cómo ha sido esa época, o proceso. Por eso, al terminar el año es más fácil que revisemos cómo ha ido nuestra vida durante el año anterior y que detectemos cambios que queramos llevar a cabo.
¿Cómo conseguir incorporar cambios reales?
Ahora que ya sabemos porqué el año nuevo es un momento idóneo para mucha gente a la hora de realizar cambios importantes en sus vidas, vamos a ver algunas estrategias que nos ayudarán a llevar a cabo la famosa frase año nuevo, vida nueva.
Busca la motivación personal para hacerlo
La primera estrategia que tenemos que poner sobre la mesa es realizar un cambio por que realmente estemos motivados. Esta motivación además debe ser intrínseca, es decir tiene que salir de nosotros y no realizarla por una obligación externa (por ejemplo, porque todo el mundo dice que hay que hacerlo). Si no estamos motivamos para conseguirlo por nosotros mismos va a ser mucho más difícil que instauremos un cambio real y duradero y puede incurrir en que se desarrollen problemas como la falta de autoestima o la depresión. Por ello un punto de vital importancia va a ser proponernos un objetivo por el que nuestra motivación sea personal y auténtica.
– Si quieres saber más sobre qué es la motivación, puedes leer nuestro artículo sobre el tema pinchando aquí
Ponte una meta concreta
Una vez que sabemos qué cambio o que objetivo personal vamos a poner en marcha, el siguiente paso es concretar qué queremos conseguir. Este paso es muy importante porque nos va a ayudar a focalizarnos y a establecer cómo tenemos que trabajar por conseguir nuestro objetivo. Si ponemos un objetivo poco concreto y específico va a ser más difícil trabajar por él y saber si lo hemos alcanzado o no. Por ejemplo, podemos querer llevar una vida más sana pero está poco concretado lo que queremos. Sin embargo, es mucho más específico ponerse como meta hacer ejercicio tres días a la semana y llevar una dieta saludable de lunes a viernes. De esta forma nuestro objetivo está mucho más claro y nos permite tener una meta concreta por la que luchar.
Establece metas intermedias
Cuando ya tenemos claro y bien especificado nuestro objetivo el siguiente paso va a consistir en establecer metas u objetivos intermedios. El establecimiento de metas intermedias va sernos de ayuda por dos motivos principales. El primero de ellos es que nos permite realizar un camino y unos pasos a seguir para alcanzar nuestro objetivo. Es decir, suponen una hoja de ruta para conseguir nuestro objetivo final. El segundo motivo es que establecer estos objetivos intermedios nos va a ayudar a mantener la motivación a medio y largo plazo, ya que nos va a permitir ver que vamos alcanzando el objetivo y que nuestro esfuerzo se vea recompensado.
Prémiate por los resultados obtenidos
Por último, para ayudarnos a conseguir nuestros objetivos y realizar cambios duraderos es importante que nos reforcemos y premiemos por los resultados que vamos obteniendo. Una parte importante para poder mantener la motivación son los refuerzos que vamos obteniendo. Estos refuerzos no tienen porqué ser materiales, sino que pueden ser de cualquier tipo. Pero es muy importante que nos vayamos reforzando cuando cumplamos objetivos ya que eso nos va a ayudar a seguir luchando por nuestro objetivo y a sentirnos bien por hacerlo.
Artículo escrito por CIPSIA Psicólogos Madrid: Sara Catalán