La familia es uno de los grupos sociales que más influencia tiene en la persona. En la familia se aprenden muchas de las conductas, hábitos y valores que conforman nuestra forma de ser cuando somos adultos. Además, las relaciones familiares son muy importantes ya que nos permiten aprender y desarrollar nuestras habilidades sociales. Sin embargo, en la familia también se pueden producir problemas que afecten a los individuos de forma individual y al núcleo familiar de forma grupal. Para solucionar estos problemas, está la terapia de familia de la que hablaremos en profundidad en el artículo de hoy.
¿Qué es la terapia de familia?
La terapia de familia es un modelo de terapia cuyo objetivo principal es mejorar el ambiente y la dinámica familiar para que todos sus miembros se encuentren satisfechos. Dependiendo del problema concreto que traiga la familia a consulta, se plantearán unos objetivos terapéuticos concretos y se articularán unas técnicas u otras en el tratamiento.
Además de tener como objetivo mejorar las relaciones y dinámicas familiares como características propia, la terapia de familia también se diferencia del a terapia individual en otros aspectos. El primero de ellos y el más importante, es que es un tratamiento que se realiza con todos los miembros de la familia (o al menos los que conviven juntos). Además, tiene el objetivo de conseguir el bienestar de todos sus miembros y no de uno de ellos.
¿Qué tipos de problemas se trabajan?
En la terapia de familia, se trabaja con cualquier tipo de problema que surja en el seno de la familia y que afecte negativamente a la relación entre sus miembros y a la satisfacción familiar. De este modo, los problemas que pueden ser objeto de trabajo en terapia de familia son muy variados. Sin embargo, la mayoría de los problemas que suelen aparecer en terapia de familia se agrupan en la siguiente clasificación.
Problemas de relación entre varios miembros de la familia
Cuando existen conflictos continuos entre dos miembros de la familia, su relación se ve deteriorada. Además, estos problemas que surgen entre ambos influyen de forma determinante en los demás miembros de la familia, pudiendo ocasionarse conflictos entre otros miembros. Como consecuencia última, la satisfacción de la familia se ve influida negativamente por este problema.
Problemas en la dinámica de las relaciones familiares
En ocasiones, el problema no se produce debido a una mala relación o conflictos entre dos miembros concretos de la familia, sino que es una cuestión de cómo se relacionan todos ellos. Es decir, en estas situaciones la causa del malestar reside en cómo
la familia ha articulado la forma que todos sus miembros tienen de relacionarse entre sí.
Problemas por la pérdida de un familiar
La pérdida de un familiar, es un momento muy doloroso para cualquier persona. Si además ese familiar forma parte de nuestro núcleo, de las personas con las que convivimos la pérdida se hace mayor y puede generar problemas en la familia. La mayoría de los problemas que suele generar en el núcleo familiar, tienen que ver con el dolor de la pérdida y las dificultades para adaptarse a una nueva dinámica familiar sin esa persona.
Problemas por el cambio del núcleo familiar
A veces las familias sufren un cambio muy drástico en su vida, que afecta a su dinámica. Cuando esto sucede, los problemas que se generan a raíz de la adaptación por la que tiene que pasar la familia pueden producir distintos conflictos. Algunos de estos conflictos son: cambios en la dinámica, aumento de las discusiones, dificultades de relación, etc. Estos problemas suelen afectar negativamente a todos sus miembros y a su satisfacción.
¿Cómo sé si debo acudir a terapia de familia?
Al igual que cuando se trata de un problema psicológico de índole individual, cuando hablamos de terapia de familia existen ciertos criterios que nos pueden ayudar a tomar esta decisión. A continuación os presentamos los tres criterios más importantes.
– Si te interesa saber más sobre cuándo acudir a un psicólogo, puedes leer nuestro artículo pinchando aquí.
- Los distintos intentos de solución que hemos intentado no han dado resultado. Cuando esto sucede, la ayuda de un profesional puede ayudar a desbloquear la situación, dando una perspectiva objetiva y técnica de los problemas y su solución.
- Este problema interfiere de forma determinante en la vida familiar e individual de cada miembro de la familia, produciendo un gran nivel de sufrimiento o malestar. Cuando existe un problema familiar, es frecuente que esto afecte de forma determinante en el estado de ánimo, al bienestar de todos los miembros que componen esa familia.
- Esta situación está interfiriendo en otras áreas de la vida de cada miembro de la familia. La existencia de un problema familiar de estas características, termina por afectar no sólo a la familia como grupo, sino también a la vida de los individuos que forman esta familia. Por eso, es habitual que los problemas en estas áreas causen problemas en las demás áreas de la vida de los miembros de la familia.
Si crees que tu familia puede necesitar terapia o te surgen dudas al respecto, puedes contactar con nuestro equipo pinchando aquí.
Artículo escrito por CIPSIA Psicólogos Madrid: Sara Catalán
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