Muchas veces a lo largo de nuestra vida tenemos que tomar decisiones que son difíciles para nosotros porque supone decir que no a algo. Esto supone una sensación de pérdida y emociones negativas que producen una situación con mucho malestar y sufrimiento. Sin embargo, hay otra forma de gestionar este tipo de situaciones y a ello dedicaremos el artículo de hoy: decirse sí a uno mismo.
Decirse sí a uno mismo
Las situaciones de caos, crisis o cambio en ocasiones nos presentan decisiones complejas de tomar, pero también suponen una oportunidad de crecimiento personal. A veces, aunque los cambios asusten suponen una oportunidad para mejorar aspectos de nuestra vida que no están funcionando, o que suponen finalizar una etapa en nuestra vida que ya ha llegado a su fin. En estas situaciones, nos puede generar miedo no saber qué consecuencias va a tener esta decisión para nuestra vida y sentimos que estamos renunciando a cosas. Esta concepción nos va a generar tristeza y sentimientos de pérdida e incluso puede afectar a nuestra autoestima.
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Sin embargo, las situaciones de caos y cambios pueden ser un punto de inicio de una nueva etapa que nos depare o mejore aspectos que ya no estaban funcionando en nuestra vida. Para ello es importante cambiar nuestra idea de las tomas de decisiones y entender que no sólo estamos diciendo que no a algo sino que estamos diciendo que sí a nosotros mismos. Entender que decirse sí a uno mismo puede traer aspectos positivos, es imprescindible para dejar atrás aspectos negativos de nuestra vida. Cuando se nos presenta esta situación tenemos la opción de interpretar esta situación como una oportunidad de decir sí a lo que queremos, de decir sí a aquello que creemos que va a ser lo mejor para nuestra vida, de decirse sí a uno mismo.
Artículo escrito por CIPSIA Psicólogos: Sara Catalán