Las navidades como estresor

¿Has vivido estas navidades como un hecho estresante? ¿Has discutido con tu pareja más de lo habitual en esta época? La época de navidades como estresor.

Las navidades suelen ser unos días en los que las personas que viven lejos vuelven a su casa, se reúnen con su familia, y se retoma contacto con las viejas amistades.

No es de extrañar que al juntarse de nuevo toda la familia, personas que actualmente ya tienen vidas muy distintas y papeles muy diferentes en la sociedad se encuentren inmersas en sus antiguos roles familiares o sociales.

Por ejemplo, una persona que en su casa siempre ha tenido un rol determinado, que gracias a su desarrollo personal y a su propia evolución supera una determinada forma de actuar en las relaciones sociales, cuando vuelva a su casa o se junte con su familia a la que diariamente apenas trata, su forma de interactuar con sus familiares tenderá a volver a ser la del rol inicial. La sensación de retroceso que produce este hecho o la percepción de que los otros te impiden prosperar, puede causar cierto sentimiento de frustración o rabia hacia nosotros mismos y hacia los otros.

Si a esto le unimos el recuerdo de antiguos enfrentamientos con ciertas personas de la familia, formas de opinar muy distintas entre personas de una misma mesa, asuntos no resueltos internos de cada familia en particular y le añadimos la interacción con el abundante alcohol que se puede llegar a ingerir en estas fiestas puede resultar un coctel explosivo.

estresor

Es por esto y por muchos otros factores que las navidades pueden llegar a ser un estresor de gran importancia, que puede llegar a desestabilizarnos y a crearnos cierto malestar. En este caso te recomendamos que busques apoyo psicológico para aprender a afrontar estas situaciones.

En el caso de las relaciones de pareja, que normalmente organizan los días de forma que puedan tener reuniones sociales con las dos familias, se añade la dificultad de combinar los roles de un miembro de la pareja con su familia y a la vez combinar el rol que tiene en la relación de pareja.

Por otro lado, uno de los inconvenientes que pueden tener las navidades es que las parejas, pueden perder el espacio del que suelen disponer para estar juntas. Al ser días en que todos los grupos de amigos suelen quedar y las familias también se reúnen organizando varios eventos, todo el tiempo que antes se destinaba a disfrutar en pareja o de hacer actividades los dos solos se ve suprimido por falta de compatibilidad. Esto se acentúa aún más en el caso de las parejas que viven lejos de su hogar o que no disponen de casa propia en el lugar de las celebraciones.

Todas estas situaciones o factores estresantes, si no los gestionamos de una forma adecuada, pueden llegar a provocar continuas discusiones con nuestra pareja, o incluso pueden causar conflictos familiares explícitos y manifiestos.

Los psicólogos de CIPSIA psicólogos te damos algunos consejos a tener en cuenta durante las próximas fiestas de navidad:

  • No cargues con todo el trabajo de la preparación de una comida. Deja que te ayude tu pareja, o reparte la preparación de los platos entre los distintos hermanos. De modo que no asumas todas las responsabilidades. A veces es necesario delegar para que las cosas se hagan mejor y más a gusto.
  • No proyectes toda tu frustración hacia tu pareja, si las cosas no han ido como tú esperabas, ella no tiene la culpa, es necesario entender que a veces no se pueden controlar las reacciones de la gente o las interacciones sociales y llevarlas por donde uno quiere.
  • Intenta buscar un tiempo en estos días para hacer algo de deporte, pues el deporte te aportará la tranquilidad y serenidad necesaria para afrontar cualquier situación, te ayudará a relacionarte con más eficacia y hará de amortiguador al estrés.
  • Intenta mostrarte tal y como eres con tu familia, no intentes resolver conflictos pasados, y sobretodo no te dejes llevar por tus sentimientos súbitos en el momento de más ajetreo. Relájate y disfruta de tus familiares, que al fin y al cabo solo ves de forma conjunta una vez al año.
  • Dedica un tiempo a disfrutar de tu pareja y de vuestra relación de forma independiente a la dinámica familiar. Podéis hacer una escapada romántica, ir a cenar solos, etc.
  • No te llenes la agenda con excesivos compromisos, es mejor hacer pocas cosas y estar a gusto en el transcurso de estas que intentar abarcar mucho e ir agobiado a todos estos.

Artículo escrito por Psicologos Madrid Cipsia Psicólogos: Anna Cadafalch