La Musicoterapia

La musicoterapia es un proceso de intervención sistemática en el cual el psicólogo asiste al paciente en la búsqueda de la mejora de su estado de salud, empleando experiencias musicales que se desarrollan como fuerzas dinámicas para incentivar el cambio.

Esta modalidad de terapia es un importante recurso en la ayuda psicológica del paciente. La musicoterapia utiliza la música como medio, no como fin. No se busca que la música sea bella, sino que se consiga gratificación en el proceso de creación de esta.

El tipo de música que se puede utilizar es muy variado: se puede cantar, tocar un instrumento, bailar, etc. Se puede hacer en la modalidad solo o acompañado de otros pacientes en las diferentes etapas de la ayuda psicológica, creando en este caso una comunicación y coordinación entre los diferentes pacientes que puedan intervenir.

Todas las personas pueden hacer música, no importa que se desafine o no se sepa tocar el instrumento. La clave para la musicoterapia es escuchar la música que se está produciendo y observar lo que te hace sentir. El objetivo es el disfrute, la exploración de las propias capacidades, el sentir el ritmo, y la emoción de escuchar la música que uno mismo produce.

Según la AMTA, American Association of Musictherapy:

«La Musicoterapia es la utilización de la música para conseguir objetivos terapéuticos: la restauración, mantenimiento y mejora de la salud mental y física. Es la aplicación sistemática de la música, dirigida por el Musicoterapeuta en un contexto terapéutico a fin de facilitar un cambio de conducta. Estos cambios ayudan a que el individuo en terapia se entienda mejor a sí mismo y a su propio mundo, llegando así adaptarse mejor a la sociedad».

Beneficios de la musicoterapia:

  • Ayuda a establecer así como mejorar la comunicación verbal y no verbal entre personas,  ya que la música es un tipo de lenguaje. 
  • En la ayuda psicológica a adolescentes es muy útil, debido a que estos son especialmente receptivos a la música y mediante ésta se puede llegar fácilmente a ellos.
  • Ha sido documentado que en personas con alguna discapacidad  es muy beneficiosa. Especialmente en niños o personas que no pueden hablar, o tienen una movilidad reducida, ya que ayuda a mantener la movilidad y el tono muscular adecuado.
  • Mejora el aprendizaje, a la orientación en la realidad, mantiene las capacidades de atención y concentración activas.
  • Promueve la relajación y disminuye los niveles de ansiedad. 
  • Estimula la comunicación y la interacción social. Es muy recomendable en personas con problemas en las relaciones sociales o en autistas. La música reduce y previene el aislamiento y mejora la autoestima. 
  • Facilita espacios de reflexión sobre temas importantes y trascendentales en la vida.

Se han hecho múltiples experimentos relacionados con la musicoterapia. Uno de ellos es el denominado “Chupete musical” y se puso en práctica con bebés que estaban en incubadoras y a los cuales les costaba mucho comer. El experimento constaba en que, cada vez que estos absorbían la comida a través del biberón, se les hacía escuchar música. Se descubrió que estos cada vez chupaban más y comían más. Al cabo de un tiempo los bebes con estimulación musical adquirían más peso y podían salir antes de la incubadora. 

También se han hecho experimentos con embarazadas, en los que se ha demostrado que los bebes dentro de la madre ya son capaces de responder a estímulos musicales.

En definitiva, es un medio utilizado por los diferentes equipos de psicólogos en las diferentes terapias en la ayuda psicológica al paciente.

Artículo escrito por Psicologos Madrid Cipsia Psicólogos: Anna Cadafalch